
La presencia de chinches en oficinas es mucho menos común que en hoteles y alojamientos turísticos, debido a la alta rotación de personas con equipajes y a la disponibilidad de alimento para estos insectos durante la pernoctación. Sólo en situaciones excepcionales las chinches pueden llegar a reproducirse en las oficinas pero ¿cómo proceder si se las detecta en este entorno no habitual?.
Control de chinches en oficinas
No existe una estadística oficial en Europa que cuantifique con precisión el porcentaje de infestaciones de chinches de la cama (Cimex lectularius y Cimex hemipterus) que ocurren específicamente en oficinas, frente a hoteles o alojamientos turísticos. Pero, en términos relativos, las infestaciones de chinches siguen siendo mucho más reportadas y predominantes en hoteles y alojamientos turísticos que en oficinas, debido a la alta rotación de huéspedes y a la mayor probabilidad de introducción pasiva con el equipaje.
No obstante, con la gran movilidad de las personas, puede suceder que empleados o visitantes externos lleven chinches en bolsos, mochilas, paquetes, etc. al interior de las oficinas. Aunque, cuando se detectan se suele considerar como una introducción de los insectos en las oficinas más que como una infestación. A pesar de que pueden causar molestias y ansiedad, sólo en situaciones excepcionales las chinches pueden llegar a reproducirse en las oficinas, ya que la sangre que necesitan para producir huevos es difícil de conseguir en ese entorno.
Ante una queja por chinches en unas oficinas, ¿cómo proceder? ¿Cómo localizar y tratar las chinches en un lugar tan poco habitual?

Diferencias en las infestaciones de chinches en alojamientos y oficinas
Vamos a ver algunas diferencias entre la presencia de chinches en alojamientos y en oficinas:
Las vías de introducción
- En alojamientos la vía principal son los huéspedes con objetos infestados (maletas, ropa, etc.). Son introducciones frecuentes y repetidas.
- En oficinas la introducción suele ser esporádica y más localizada, mediante empleados o personas externas que traen chinches en ropa, bolsas o desde domicilios, o artículos de segunda mano/equipos usados. Es interesante preguntar a la persona que detectó el indicio de infestación si ha realizado desplazamientos o movimientos recientes de objetos. Con un poco de suerte, las chinches pueden encontrarse todavía concentradas alrededor del escritorio de la persona que los trajo desde casa.
Densidad y distribución
- En alojamientos las infestaciones con frecuencia se localizan en camas, somieres, cabeceros y mesillas y pueden expandirse rápidamente entre habitaciones contiguas vía huecos, cámaras de instalaciones o por objetos portados por el personal.
- En oficinas las infestaciones suelen ser de baja densidad y muy localizadas (sillas, sofás de zonas comunes, taquillas, archivadores, cascos, equipos electrónicos), pero pueden permanecer latentes largo tiempo porque las personas no pernoctan allí y el necesario acceso a la sangre humana es más limitado.
Comportamiento alimentario y actividad de las chinches
- Las chinches tienen un acceso fácil a la sangre de los huéspedes en los alojamientos, mientras duermen en la cama durante la noche, y la reproducción de los insectos puede ser intensa.
- En oficinas las chinches tienen menos acceso a huéspedes y los ciclos de alimentación pueden ser menos frecuentes, llevando a pequeñas poblaciones de adultos y ninfas hambrientas dispersas buscando refugio.
Signos visibles
- En alojamientos, los signos de alerta incluyen manchas de sangre en sábanas, exuvias, huevos visibles en las costuras de los colchones o un olor característico en infestaciones masivas.
- Los signos son menos evidentes en las oficinas: pequeñas manchas en sillas, picaduras aisladas reportadas por usuarias/os, manchas en mobiliario.
Acceso para la inspección
- El acceso es fácil en habitaciones y otras zonas de los alojamientos, tras la salida del huésped, para realizar tratamientos extensos, con un mayor control sobre los horarios.
- En cambio, el acceso en las oficinas puede ser más complicado por continuidad laboral, confidencialidad, presencia de equipos informáticos, documentación y zonas cerradas (servidores, archivos), lo que limita los tratamientos extensos.

Diferencias en la estrategia y técnicas de tratamiento
Las chinches se comportan de forma diferente en las oficinas que en hoteles y otros establecimientos turísticos, desplazándose con mayor frecuencia y propagándose a lugares menos predecibles. Como hemos visto, las poblaciones crecen lentamente y, generalmente, no mediante reproducción sino mediante introducciones repetidas, a menudo por las mismas personas.
Al principio pueden estar activas por la noche en las oficinas, pero como no suelen encontrar huéspedes de los que alimentarse pueden trasladar su actividad al día. Dado que las chinches se encuentran fuera de su entorno habitual, es difícil predecir dónde acabarán mientras buscan huéspedes.
Tanto en el contexto de los alojamientos turísticos como en el de las oficinas aplica el control integrado de plagas (CIP), que incluye las fases de inspección, identificación de la plaga, la combinación de medidas físicas/ambientales, los tratamientos químicos cuando proceda, la comunicación y el seguimiento.
Pero el énfasis y la selección de técnicas a la hora de abordar el problema pueden variar:
Inspección y monitorización
- El alojamientos se lleva a cabo una inspección sistemática (habitaciones, costuras de colchones, marcos de cama), y suelen utilizarse trampas de captura y monitores con atrayentes para realizar chequeos periódicos recurrentes.
- En las oficinas, la inspección suele focalizarse en el mobiliario blando (sofás, sillas tapizadas, sillones de cafetería), área de recepción, taquillas, salas de reuniones, archivadores, áreas de descanso, debajo de las molduras, en conductos y en equipos de oficina.
Es habitual colocar monitores activos que utilizan un cebo como CO2, un atrayente químico o calor, colocados en puntos estratégicos (debajo de escritorios, detrás de rodapiés, en armarios) y programar inspecciones discretas para no alarmar.

Aplicación de medidas no químicas
En muchos casos, las medidas no químicas son suficientes en oficinas pequeñas:
- Un aspirado intensivo con aspirador HEPA puede eliminar adultos, ninfas y huevos superficiales, y es muy apropiado en oficinas porque evita la retirada de equipos y no genera tiempo muerto.
- Vapor a ≥100–110 °C en única pasada sobre costuras y pliegues es efectivo para matar adultos, ninfas y huevos en superficies como tapicerías o zócalos. No obstante, hay que tomar precauciones con los equipos electrónicos o superficies no resistentes al vapor.
- En oficinas es frecuente la aplicación de tratamientos de calor local, con pistolas de vapor, sistemas portátiles de calor dirigido y cámaras portátiles, para tratar mobiliario o archivos.
- Lavado o termotratamiento (frío o calor) de prendas de ropa y textiles. Como prevención sellar los objetos personales sospechosos en bolsas cerradas para inspección/tratamiento.
- Los tratamientos térmicos integrales, que son muy efectivos en hoteles con habitaciones vacías, son complicados en oficinas debido a la presencia de equipos y a la continuidad operativa del espacio.
- La congelación aplicable a objetos pequeños tiene una aplicación limitada en oficinas.
Uso de medidas químicas
En hoteles, dada la alta densidad de las infestaciones y la posibilidad de tratamiento completo de las habitaciones, se emplean insecticidas residuales por pulverización (p. ej. productos a base de piretroides, neonicotinoides, IGRs y/o combinaciones).
En cambio, en las oficinas la aplicación química suele ser mucho más selectiva y con especial atención a la seguridad de las personas, y equipos:
- Priorizando los tratamientos puntuales en grietas, juntas, huecos de mobiliario y otros refugios con formulaciones en gel o polvos desecantes (sílice, tierra de diatomeas), que requieren aplicación profesional y control de exposición.
- Usando insecticidas residuales en pulverización a baja dosis y en lugares ocultos (zócalos, pistas de cable, aristas de muebles) aplicados por personal acreditado. Hay que evitar pulverizar superficies de trabajo, teclados, equipos sensibles, documentación o alimentos.
- Evitando los tratamientos ambientales durante jornada laboral. Es preferible aplicar fuera de horario laboral o en fines de semana, o aplicar medidas puntuales durante jornada de trabajo, con señalización y retirada de personal si procede.
Es importante documentar los productos usados y las fichas de seguridad, y comunicar la intervención al servicio de prevención de riesgos laborales de la empresa cliente.








